martes, 7 de abril de 2009

¿LA DIFERENCIA?

A veces nos sentimos muy solidarios porque damos mucho de nuestro tiempo y de nuestro esfuerzo por las personas necesitadas, quizás algunos hasta cooperan con dinero, sea como sea pensamos en ellos y los ayudamos, eso es fenomenal y a la vez reconfortante.

El domingo estuve un rato con Ana-Mº, Ana es una buena amiga, tiene una risa chillona que termina contagiando a todo el mundo, muchas ganas de decir cosas y que la escuchemos y a demás te da unos besos que le salen del alma, me gusta su forma de mover la cabeza cuando la hablas, siempre confirmando lo que dices, aceptándolo con la mejor de sus sonrisas y te vea donde te vea te saluda con una euforia increíble... Siempre que la veo, aparte de esos besazos alarga la mano hacia la mía, le encanta el contacto humano....

Ayer andando por Badia me encontré con Antonio, me contó sus proyectos de trabajo, sus inquietudes por el paro en Badia y que el quiere ayudar a esta gente que lo esta pasando mal, me piropeo y hasta me presento como una Amiga...

Esto es simplemente un encuentro con dos vecinos de mi pueblo o con dos amigos que simplemente tenían ganas de hablar, de que alguien les escuche, todos tenemos esas necesidades no??? Que sepan que existimos y que se nos note que estamos.

La diferencia entre pasar este rato con Ana-Mº y Antonio a con otros amigos es que de ellos salía una sonrisa franca, de agradecimiento simplemente por estar allí a su lado, sin necesidad de pedir mas... solo mi atención, Ana Mº tiene el síndrome de Down y Antonio sufre esquizofrenia, quizás su forma de actuar sea diferente a la de otros amigos míos... ¿pero acaso no tienen el corazón en el mismo sitio que el resto?

A veces no hace falta hacer grandes aportaciones económicas y ni siquiera dedicarles tiempo extra... simplemente escucharles, hablarles, sonreírles.. darles un beso como a cualquier amigo o vecino, para ellos es suficiente.

¡Porque todos formamos Badia... Unamos Badia!

Concha Hurtado